La Cruz del Sur mi destino siguió con tres clavos filosos de luz
y el apego terrestre me ató a tus ojos voraces de azul,
viajero espiritual del tiempo sideral, persigo ese fulgor del más allá
Te amé y aun me desvela la piel resolana frutal del amor,
Adorable criatura de Dios, para siempre a tu lado estaré
porque en carne y en alma los dos fundaremos un reino de fe
Bendito sea el amor, eterno es su verdor sentido de la vida, siempre
La sal y el sol a la orilla del mar es rabioso crisol estival,