Al parecer no recordó ni quien era,
todo en su mundo se volvió paranormal.
De deambular quién sabe dónde fue a parar,
sigo su rastro sin saber como estará.
Faros del mar, vientos de abril
tráiganla a casa hasta mí.
Pegar carteles en los postes y esperar
que alguien la cruce por una casualidad.
Faros del mar, vientos de abril
tráiganla a casa hasta mí.
Faros del mar, vientos de abril
tráiganla a casa hasta mí.
En las noticias no apareces,
sólo soy yo quien te nombra.
Pretendiendo volverte a ver,
dibujándote sobre un diario en la alfombra.