Voy a cantarle a los gallos hasta que traigan el día,
el día que traiga el sol del día aquel que te perdía.
Detendré la luz, la cicatriz volverá a ser su herida
para reír donde lloré y poder celebrar la despedida.
La felicidad es tan grande que de cerca no se ve.
La vemos cuando está lejos, cuando se fue.
Es una mariposa de mil alas que se arrastra sobre un pie,
son los eslabones tiernos de una cadena de miel.
Inter: ídem intro
es violencia y es renuncia, es una deuda del bien.