Un murmullo del corazón es mi canto a Ti Señor
donde puedo llamarte mi Salvador.
En el fuego de mi interio se consume mi adoración,
sacrificio de alabanza te doy.
Y no puedo callar mi voz, ni estas lágrimas de emoción,
se consume en tu altar mi corazón.
No, no puedo parar Señor este canto de mi interior
donde puedo llamarte mi Salvador.
Oh Jesús, eres el agua viva.
Mi Salud, mi escudo y sanador.
Salvador, mi gran libertador.
Dios de amor, y necesito más de Ti.