Es por tu manía, de ir, a una ciudad
Y dejándonos está, tarados, la metrópoli
como tú y yo, bronceados, no hay aquí
les oí decir, esos dos de ahí, vienen del pueblo
Se rieron, divirtieron pues supieron
que muy pronto nosotros también estaríamos como ellos
paliduchos, como rascacielos, con la cara de cera
con la cara de cera, ya no hay limpia ni la estratosfera
así siempre será, mientras vivas en una ciudad
En aquellos campos, tomabas, conmigo el sol