Te has marchado con la espalda, llena de caricias,
en la madrugada, es una noche en calma,
la última cena, donde estabas tú, María Magdalena,
donde estaba yo, mas ahora en la otra acera,
desde el stop.
He interpretado tu cara, tu has tornado el gesto,
mientras te contaba, vivo enamorada,
y es otro tipo, quien me aguanta el llanto y me roba el sentido,
a quien ahora mis canciones le dedico, con tanto amor
Me cuesta tanto e,
me cuesta tanto entender que no,
supimos aflojar,
paranos a pensar,
que lo que no se cuida, morirá.
me fui sin avisar, me fui sin avisar
No volveré a echarnos la culpa,
que no hace falta a estas alturas,
me fui sin avisar, me fui sin avisar
dejé la puerta entornada al marchar.
¿Qué será?, ¿por qué nos pasa?,
¿Por qué pasa el tiempo?, pero no la etapa,
de acabar el cuento, soltar el lazo,
de cerrar capítulos improvisados,
nublar el cielo de nuestros tejados,
desde un stop.
Me cuesta tanto re,
me cuesta tanto repliacarte y hoy,
me tiro en el sofá, escribo sin pensar,
y es que me das para otro tema más,
me fui sin avisar, me fui sin avisar
No volveré a echarnos la culpa,
que no hace falta a estas alturas,
me fui sin avisar, me fui sin avisar
dejé la puerta entornada al marchar.
me fui sin avisar, me fui sin avisar
dejé la puerta entornada al marchar.