Qué duro ha de ser para el poeta
llegar al paraíso,
mirar para abajo o para arriba
y ver que nada pasa,
solo que sus libros en pieles están
encuadernados en la biblioteca
fichados de blanco.
repite la armonía anterior
Qué duro ha de ser para el poeta
llegar al paraíso,
mirar para abajo o para arriba
y ver que nada pasa,
solo que sus libros en pieles están
encuadernados en la biblioteca
fichados de blanco.
repite la armonía anterior