Trincheras perdidas, por sendas dormidas,
soberbia de ira, de odio y rencor
Trincheras de odio, de desolación,
odio que separa mi amor de tu amor,
abismos surcados por nuestro destino,
como el torbellino de una maldición;
odio que separa, tu vida que es mía,
tu vida que es sombra en mi soledad,
si al decir te quiero, dijiste verdad,
así he de quererte una eternidad.