Como quisiéramos
Que te quedaras con nosotros
Todo se acaba
Pero que dure una eternidad
Cuando te reías
Pero que dure una eternidad
Palermo, los tambores sin consuelo y nosotros egoístas
Siempre estallabas
El pulso del ritmo de tu voz sobre nuestras espaldas
Ahora son como un lastre de caricias que nos hacen falta, oh Dios!
Palermo, los tambores y nosotros egoístas
Hoy ya no somos lo mismo
Se nos hace difícil actuar
Por quererte y no tenerte
Nunca dejaremos de escuchar
Lo que nos dijiste el día que te fuiste
El AS del ritmo (X3)