No te puedo olvidar,
cada tarde, tus ojos tristes vuelven a mí,
y lejanos, se van
por las tardes donde miramos,
herido el cielo crepuscular
alumbraba tu voz,
nuestro paso en la noche clara, llena de ti;
y la niebla del mar
nos rodeaba de un leve sueño,
y era infinita la soledad.
Yo busco un olvido, ¿Donde lo hallaré?
si lo encuentro, que triste.
¡Ay!, con mi sombra me quedare.
Siempre vas junto a mi;
cada cosa que miro, ya la vimos los dos,
cuando en lento vagar
se quedo el lucero en tus manos,
en el dorado tiempo de amar
No te puedo olvidar,
ando solo en la noche, siempre nombrandote;
y a la orilla del mar
dice el viento que oye tu nombre;
!Amor que nunca regresaras¡
Yo busco un olvido, ¿Donde lo hallaré?
si lo encuentro, que triste.
¡Ay!, con mi sombra me quedare.