Quiero que mi Navidad
no se me escape una vez más,
escuchar al mundo entero,
cambiar mis ojos cansados ya de juzgar.
He intentado ser feliz,
alejarme siempre de tu calor,
he negado mi amistad
al querer llenar de oro mi corazón.
NO DURMÁIS, QUE UN NIÑO VENDRÁ,
VENDRÁ EL SEÑOR, ES NUESTRO DIOS. (2)
Tú me has ofrecido en Ti