¡Nendivei!, che nendivei,
ha de repetirte mi fiel purhajei,
¡Nendivei¡, vivir así
es lo que ambiciono, che kuñataí.
¡Nendivei¡, feliz yo soy,
todo es dulce y grato si a tu lado estoy,
y en amor soy rey
mientras pueda repetirte: Che nte nendivei.
II
Los sones que en mi guitarra durmiendo están,
de pronto, para cantarte, despertarán
y bajo la clara luna de Taragüí
susurros de serenatas se harán por tí.
La noche, blanca de azahares, perfumará
la trova que en tu ventana florecerá,
y loco tras de tus besos, mi purhajei,
te irá repitiendo siempre: che nte nendivei.
III
Pasionaria en flor,
E mburucuyá,
de mi mbaracá,
la que en su sentir
Che nte nendivei.
II (repite)