Madre, óyeme,
mi plegaria es un grito en la noche.
Madre, mírame,
en la noche de mi juventud.
mil peligros asechan mi vida.
Madre, lléname
de esperanza, de amor y de fe.
en la sombra no encuentro el camino.
Madre, llévame,
/ Madre, tú eres la Madre, Madre de la juventud./
Madre, una flor,