Ya estoy harto de dar la razón
al que luego me pisa
y reírme sin mi risa
Cuando ya no pe puedan herir
cuando revienten las rejas que tengo ante mi
me iré, a vivir a la casa de la dama feliz
Ya estoy harto de andar dando palos
de ciego entre sueños,
entre grande y pequeño
Cuando sólo se acerquen a mi
los lamentos de un mundo que empieza a morir
me ire,a vivir a la casa de la dama feliz
Por qué hay estrellas aún en su noche azul
y nieve en su jardín
y su casa de madera respira paz
y maneja al sol,sólo con hablarte
sólo con su mágica voz,sólo con su mágica voz
Cuando todo lo dé y me quiten el banco en la calle
el lugar de saltar sobre el primer
Jesucristo que pase
cogere mi guitarra y me ire
más hay de mi huella y mi cicatriz me iré
a vivir a la casa de la dama feliz
a la casa de la dama feliz