Hay una mujer que edificó piedra por piedra
Esta aventura de sortilegios y rarezas
Es tragedia y verso libre de Neruda
Es mi cómplice, mi fecha y mi locura
Hay una mujer que se hizo amiga de la escoba
Para barrer las espinas que no fueran de sus rosas
Es destierro, gota de agua y luego lluvia
Es mi adagio, mi sonata y mi obertura
Hay una mujer
Que me convoca a navegar por sus sentidos
Que me provoca desafiar a sus molinos
Que me define como suyo y no al revés
Hay una mujer
Que es el dragón y la princesa de mis cuentos
Es la estación a donde arriban mis deseos
Y la extensión de cada parte de mi ser
Hay una mujer que se inventó la primavera
Con sueños lindos mitad carmín, mitad tormenta
Y me lleva hasta los cuernos de la luna
Luz interna, cielo abierto, sepultura
Hay una mujer
Que me provoca a navegar por sus molinos
Que me convoca desafiar a sus sentidos
Que me define como suyo y no al revés
Hay una mujer
Que es el dragón y la princesa en mis deseos
Es la estación a donde arriban nuestros cuentos
Y la extensión de cada parte de mi ser