Nada más se supo de aquel hombre
Al que le gustaba ver llover,
Vestirse con traje oscuro y contar historias de amor y muerte
Que nadie pudo entender
Nada más se supo de la chica triste
De la parada de autobús
Quiso hacerse invisible y volar, volar en caida libre
Seguir de cerca una luz
Estamos tan cerca de lo absurdo
Tan lejos de la ingravidez
Cierra los ojos cinco segundos hasta desaparecer
// EAH, POS LO QUE QUEDA IGUAL