Fue una mañana que me golpearon tocaron timbre, o? ¿que se yo?,
era la yuta, se disculpaba, dijo que un tiro se le escapó,
me dio la mano, luego un puñado, eran cenizas de nuestro hijo,
hace dos días, salió de casa, setenta kilos llenos de amor,
y me devuelven, doscientos gramos, en un paquete, que era de
arroz,
y yo pregunto:-¿y todo el resto? -y me contestan: -que hubo un
error,
iba al laburo con mucho orgullo y gatillo fácil lo liquidó,
Gatillo fácil volvió a hacer click siempre: ?es por las dudas?,
y la justicia premiándolo fue que lo absolvió.