Ella, la que hubiera amado tanto,
La que hechizó con música mi alma,
Me pide con ternura que la olvide
Que la olvide sin odios y sin llanto.
Yo que llevo enterrado tantos sueños,
Yo que guardo tantas tumbas en el alma,
No sé por qué sollozo y tiemblo
Al cavar una más, una más en mis entrañas.
Yo que llevo enterrado tantos sueños,
Yo que guardo tantas tumbas en el alma,
No sé por qué sollozo y tiemblo
Al cavar una más, una más en mis entrañas.