Sepa usted, señor mío
que me vanaglorío,
de que a su mismo lado,
me hayan enjaulado.
Le dijo el tigre al pálido canario
que también se encontraba prisionero
soportando ese mísero calvario,
ni más ni menos como el tigre fiero
Yo también señor tigre,
y mientras no peligre,
celebro que a su lado,
me hayan colocado
Le contestó el canario, un poco serio
y luego le pregunta, diga amigo,
por qué es que nuestro pérfido enemigo,
lo tiene en tan penoso cautiverio.
Porque soy sanguinario,
le contestó al canario el temible felino.
Sabe usted, vecino,
cuál es la seria acusación que pesa,
que lo tiene sumido en tal quebranto.
a mí me tienen preso porque canto.