P: Eco
R: Eco, Eco
P: ¿Cómo estás?
R: ¡Muy bien!
P: ¡Eco!
R: ¡Eco, eco!
P: Háblame de mi amada
R: ¡Hada, hada!
P: Responde A E pregunta
R: Pregunta, pregunta
P: Dime, ¿quién es la más noble doncella?
R: Ella ¡ella!
P: ¿Cómo son sus espléndidos cabellos?
R: Bellos, bellos
P: ¿Qué sonrisa en sus labios se adivina?
R: Divina, divina
P: ¿Me será siempre fiel? Dime que sí
R: No sé
P: ¿Cuánto valen su humildad y su decoro?
R: Oro, oro
P: ¿Quién es hermosa cual estrella?
R: Ella, ella
P: ¿Cómo es mi hermosa Anabella?
R: Preciosa / preciosísima / Un hembrononón
P: Te contaré un secreto algo procaz
R: ¡Haz! ¡haz!
P: Te diré lo que ocurre cuando me habla
R: ¡Habla! ¡Habla!
P: Me enloquece su boca carmesí
R: ¿Y?, ¿y?
P: Despertar mi deseo ella consigue
R: Sigue, sigue.
P: Y nos damos con loco frenesí
R: ¡Sí! ¡sí!
P: Largos besos que no acaban jamás
R: ¡Basta!
P: No
No digo más.
P: Una de estas mañanas, una cualquiera
R: Una cualquie
P: Te diré lo que ella es para mí
R: Una cualquiera
P: ¿Qué insinúa de mi amada divina?
R: Adivina, adivina.
P: Ella es una fiel compañera
R: Era, era
P: ¿Quién se interpone entre nosotros?
R: Otros, otros
P: Otros, dime sus nombres
R: Hombres, hombres
P: Dime quién es, que sin más lo mato yo
R: Yo ¡no sé!
P: Ante necios y envidiosos no reculo
R: Cu
P: En el amor no razono ni especulo
R:
P: Y por eso estos versos articulo
R:
P: Y finalizo de este modo mi cuarteta
R: ¡Culo, culo y culo!