Muy pocos Agostos han visto mis ojos,
excasos inviernos pensando en nosotros,
Pecando lo justo para no quemarme,
me aguanto las ganas de dejar de aguantarme,
y no por el cielo ni por el infierno
es que nunca consigo cumplir mis deseos.
(A)
De lo humano y lo vivido yo me quedo con los versos
que no cavan en la arena tumbas de amores sin dueño
prefiero las olas que rompieron en mi cama una mañana
las historias de verano que amanecen en mi almohada
(A)