Bajaste del norte
sin más que cuatro hijos,
y aquel cielo de tus ojos
y una mujer que te aprendió a seguir.
Buscabas el peso
Por eso te entiendo
cuando en un vaso te vas,
quien sabe adonde
buscando eso, que llaman paz.
Y aunque sabés que te dicen
Bajaste del norte
sin más que cuatro hijos,
y aquel cielo de tus ojos
y una mujer que te aprendió a seguir.
Buscabas el peso
Por eso te entiendo
cuando en un vaso te vas,
quien sabe adonde
buscando eso, que llaman paz.
Y aunque sabés que te dicen