Caminando iba Juan Diego
por el cerrito del Tepeyac
cuando oyó que lo llamaban
con un canto celestial.
Juanito, Juan Diego, ven para acá.
Muy contento fue subiendo
Caminando iba Juan Diego
por el cerrito del Tepeyac
cuando oyó que lo llamaban
con un canto celestial.
Juanito, Juan Diego, ven para acá.
Muy contento fue subiendo