Entre llanto y sonrisas irrumpió la vida
haciéndoles creer que les pertenecía;
llenando de ilusiones esos dos futuros,
¿Qué más podían pedir?
Comenzaba el desafío que los años
van dejando pronto en el olvido;
los desvelos y todas las rebeldías
que hubo que asumir.
Y aunque duele ver en el espejo
lo que en el calendario no se ve,
es más duro el paso de los años
cuando la niña es toda una mujer.
Y ahora esa mujer, esa mujer,
esa que vieron crecer, llorar ayer;
ha levantado la vista y ha empezado a andar;
ha despertado del sueño y quiere libertad;
ha comenzado a volar, ha comenzado a volar,
ahora esa mujer.
Y ahora esa mujer, esa mujer,
esa que vieron crecer, llorar ayer;
ha levantado la vista y ha empezado a andar;
ha despertado del sueño y quiere libertad;
ha comenzado a volar, ha comenzado a volar,
ahora esa mujer
ahora esa mujer.