Cuando niño ya tenía en el mirar
esa loca fantasía de soñar,
quise ser un gran malote
al igual que el papelote
que elevándose entre nubes
con un viento de esperanza, sube y sube.
Y viví en ese mundo de ilusión,
y escuché sólo mi propio corazón,
mas la vida no es juguete
y el lirismo es un billete sin valor.
Yo quise ser un papelote
buscando altura en mi ideal,
tratando de explicarle que la vida es algo más
que darlo todo por comida.
Y he sido igual que un papelote,
al que un mal viento puso fin,
no sé si me faltó la fe, la voluntad,
tan sólo sé que me apartó de tí.
En amores sólo tuve decepción,
regalé por no vender mi corazón,
hice versos olvidando
que la vida sólo es prosa dolorida
que va ahogando lo mejor
y abriendo heridas, esta vida.
Y ya ves que este cansancio sin final,
hizo trizas mi sonrisa de cristal,
cuando veo un papelote
me pregunto: ¿aquel malote donde está?
Yo quise ser un papelote
buscando altura en mi ideal,
tratando de explicarle que la vida es algo más
que darlo todo por comida.
Y he sido igual que un papelote,
al que un mal viento puso fin,
no sé si me faltó la fe, la voluntad,
tan sólo sé que me apartó de tí.