Era mu poco en la vía, tan poco que nada era,
por no tener no tenía, ni mare que lo quisiera
Era un triste afisionao, que buscaba la ocasión,
de dejar en un cerrao, frente un toro el corazón.
Romance de valentía, escrito con luna blanca,
y gracia de Andalucía, en campos de Salamanca.
Embiste, toro bonito, embiste, por caria
Morirse me importa un pito, pues nadie me iba a llora
Aquí no hay plaza, ni hombre, ni traje tabaco y oro.
aquí hay un niño muy hombre, que esta delante de un toro.
En matarme no repare, te concedo hasta el perdon
Y como no tengo mare, la macarena me ampare
si me cuelgas de un pitón.
Todas las noches saltaba, sin miedo la talanquera,