He visto un leñador cortar
el árbol que tenía
grabada en su corteza gris
tu nombre junto al mío.
El árbol ya no está
cumplió con su destino
sus ramas quemarán
y sólo quedarán cenizas.
Quiero que grabes en mi piel
y el corazón como aquel
que en ese árbol una vez
sin compasión dibujé.
Yo sé que el árbol quemarán
y el corazón que grabé
con nuestros nombres arderá
y brotaran recuerdos
recuerdos, recuerdos.