Señor, ahora que estás aquí,
quisiera hablarte de frente
contarte lo que viví
dejar llorar al silencio
tenerte cerca de mí
pues necesito tu ayuda
por eso, quédate aquí.
(Igual anterior)
Señor, vale la pena seguir
vale la pena jugarse
vale la pena sentir - se v i- vo.
Señor, nunca te apartes de mi
que este momento sea eterno
para que vivas aquí en mí.
Señor, yo quiero un mundo mejor
quiero un mundo diferente
un mundo sin depresión
un mundo lleno de puentes
lleno de cartas de amor
por eso quiero tu ayuda
quédate en mi corazón.