Las tardes de verano
a la sombra de un tala,
si habré pasado mateando
con mi tata y mi mama.
¡Ah! tiempos florecidos
¡Qué linda eran las tardes
a la sombra de un tala,
en el patio de mi rancho
mateando con mi mama!
II.
Ya nada me refleja
las horas bajo el tala;