1. Llega el día, la aurora de la salvación,
cuando el pueblo se llena de esperanza.
Llega el día, la aurora de la salvación,
porque el día a la noche venció
y el sol brilló.
El Señor trae la paz, viene con la verdad;
en sus manos ya brilla
la antorcha de libertad.
Llega el día, la aurora de la salvación,
porque el día a la noche venció
y el sol brilló.
2. Preparad los caminos del Redentor,
del Salvador,
allanad al Señor los senderos;
enterrar el temor, la esclavitud,
la humillación,
porque Él nos dará la salvación.
Con su brazo abrirá mis caminos;
a su lado seré peregrino.
3. Llega el día, salid al encuentro de Dios.
Preparad el camino al Señor libertador.
El destierro acabó, el desierto pasó;
La esperanza brilló de la mano de Dios.