Lisboa era brisa de Alfama y de mar,
Mar como lanzada de sal sin secar.
Lisboa era el mundo, Lisboa era luz,
Lisboa era mía, Lisboa eras tú.
Lisboa era un puerto donde yo atraqué,
Derramando besos llegué hasta el final,
Donde las palabras no quieren hablar.
Lisboa era el paso hacia la eternidad.
Lisboa pedía el poema mejor,
FINAL Lisboa era el paso hacia la eternidad.