Todos tienen una madre
ninguna como la mia
que arde como lucecita
haciendome compañia
la vieran dentro de mi rancho
sencillita como es ella
y sus ojitos se apagan
como el fulgor de una estrella
yo le pido a Dios rezando
que mi mamá no se muera
que viva dentro de mi rancho
como estampi ta siquiera
(hablado)
pero su sombra me alcanza
como bendicion divina
es el angel de la guarda
de mi vida peregrina
sombra del arbol plantado
en el patio solo hay un eco
retoño fiel que traduce
la voluntad de mis ruegos