Caminabas junto a mí
por el centro de Madrid,
ya casi era el alba.
Un momento nada más
te reflejaste en el cristal
de una tienda cerrada.
Fue sin querer
que recordé
Que el día en que te conocí
"Alguien que me cuide".
Caminando junto a ti,
amanecía ya en Madrid
por la calle La Palma.
Fue sin querer
que te besé.
Y al besarte,
todo mi mundo volvió a desordenarse,
como antes.
Al besarte,
todo mi mundo volvió a desintegrarse,
como antes
como antes.