Hasta el malecón del puerto
Llegó la noche a beber
Y el viejo escalón de piedra
La invitó a beber con él
Viene andando la Jacinta
Por la calle del parral
Cuando el mundo se hace sueño
Ella empieza a trabajar
La caverna se hace risa
En cuanto la ven llegar
La saludan broncas brisas
De aguardiente del lugar
La pellizca un pobre ciego
Que reconoció su olor
Y mil ojos que desnudan
Acompañan a su andar
Y mil ojos que desnudan
Acompañan a su andar
Y mil manos que no piden
Se mueven inquietas sin saber porque
Jacinta a bailar, Jacinta a beber
Amansa sus manos tan llenas de sed
Invéntate un chiste tan verde que al fin
Alegre sus caras que quieren huir
Alegre sus caras que quieren huir
La Jacinta dará olvido
La Jacinta vende amor
Cuantas horas de sudores
Con su cuerpo requemó
Cuanto frío cuanta hambre
Cuantas horas de luchar
Se quedaron en el cuarto
Que tiene encima del bar
Al subir por la escalera
Sé olvidan de callar
Los reproches son palabras
Que sé olvidan al beber
Y el aguardiente se vende
Para el que tiene sed
Y las manos que no ruegan
Se mueven inquietas Sin saber porque
Jacinta a bailar, Jacinta a beber
Amansa sus manos tan llenas de sed
Invéntate un chiste tan verde que al fin
Alegre sus caras que quieren huir
Jacinta a bailar, Jacinta a beber
Amansa sus manos tan llenas de sed
Que olviden sus penas su eterno ceder