Cuando era chico vivía en el campo
de abuelos casi italianos.
Primas y primos de nueve hermanos,
vacas, perros y caballos.
Y de los campos vecinos venían
con sus familias a visitarnos.
Dos veces al año se hacían carneadas
Ay, ay, cómo se armaba
tanta fiesta en un fin de semana.
Ay, ay, cómo se mezclaban
tías, primas, hijos, hermanos y cuñadas.
Asado y vino, cartas y tabas