En el borde del camino hay una silla
la rapiña merodea aquel lugar.
La casaca del amigo esta tendida
Y el amigo no se sienta a descansar.
LUEGO CONTINUA CON OTRO ARPEGIO
Sus zapatos de gastados son espejos
que le queman la garganta con el sol
y a través de su cansancio pasa un viejo
que le seca con la sombra el sudor.
TODA A CANCIÓN CONTINUA IGUAL, VARIA UN POCO LOS ARPEGIOS PERO
Y QUEDA PERFECTO.