Su voz, mi dirección, Cambió mi corazón.
En su verdad hallé la paz.
Jesús, mi buen pastor, Él es mi provisión,
Su vida dio sin condición.
Por eso vamos a adorarle a él,
Grande y poderoso es, nadie como él.
Me dio su protección,
Su amor borró el temor.
En su hogar me dio un lugar.
Por eso vamos a adorarle a él,
Grande y poderoso es,
Vamos a adorarle a él,
Grande y poderoso es, nadie como él.
Nunca fallará, su fidelidad, En su nombre solo confiaré. (BIS)
A Dios el Padre celestial, Al Hijo nuestro redentor
Al eternal Conso-la-dor Unidos todos adorad
A Dios el Padre celestial, Al Hijo nuestro redentor
Al eternal Conso-la-dor Unidos todos adorad
Por eso vamos a adorarle a él,
Grande y poderoso es,
Vamos a adorarle a él,
Grande y poderoso es, nadie como él.