Siempre voy a tenerte que agradecer que haya sido conmigo tan
Embustera
y me hayas enseñado lo que es querer: bailar mientras rodamos por
A escalera.
Has despejado mis dudas y has logrado que aprendiese
a ser un perfecto judas desde la jota a la ese.
Contigo que comprendido que la humedad
es algo que se seca y se olvida
gracias a ti he sabido que la verdad
es sólo un cabo suelto de la mentira.
Por eso sé que perderte
no era quedarse sin nada, la muerte es sólo la suerte
con una letra cambiada.
Embustera, tu corazón es una cremallera de Christian Dior,
blanqueas emociones traficas con botones pierdes con mi perdición.
Dormir contigo es repetir francés en
una facultad