Tono: D
Introducción:
Dm F
Calle calma, noche para escribir paredes, la ciudad es una idea
C Bb F Gm
corre por el corazón una ambulancia, me marea dulcemente una fragancia
A
y estoy demasiado cerca.
Dm F
Es en vano querer apurar el paso, confundirse con la nada
C Bb F Gm
pasar desapercibido de uno mismo, disfrutar que decoraron este abismo
A
sin pensar que es una trampa.
A Dm Gm Bb A
Maldita sea, como pareciera que nos vigila la muerte de cerca.
Dm F
Sabe a sano el espacio sin abajo, no hay manera en las estrellas
C Bb F Gm
hace centro en este mismo pensamiento la constancia de que existe un universo
A
más allá de mi posguerra.
Dm F
Todo cambio, todo intento por perderse se disuelve en un instante
C Bb F
ya no se oyen arpas sonando a lo lejos sin embargo el alma se construye
Gm A
un miedo animal y no pensante.
A Dm Gm Bb A
Maldita sea, como pareciera que nos vigila la muerte de cerca.
A Dm Gm Bb A
Maldita sea, como pareciera que nos vigila la muerte de cerca.
F C Bb
Paranoia de vigilias y de brujas, de otra voz en la garganta
C Bb F
es el sueño un pasaporte a estar excepto de la herida que aún aterra
Gm A
confirmarla como parte de este encierro.
Dm F
Me refugio de los ruidos sin origen en pensar que estás a salvo
C Bb F Gm
escuchando las cosas que no te dije intentándome dormir sin más cuidado
A
que mi sombra me fusile.
A Dm Gm Bb A
Maldita sea, como pareciera que nos vigila la muerte de cerca.
A Dm Gm Bb A
Maldita sea, como pareciera que nos vigila la muerte de cerca.