Tono: D
Introducción:
D G
Yo no he sabido darte una ventana
D G Bm A
con vistas al amor de los prudentes.
D G
Ni he cortado las rosas obedientes
D G Bm A
que cultivan el orden del mañana.
D G
Tampoco soy el hombre que se afana
D G Bm A
en las puntualidades reverentes.
D G
Mis cuatro corazones son conscientes
D G Bm A
del viento que me sigue y que me gana.
D
Pero sí puedo darte un todavía,
un modo de romper la luz del día.
G F#m Em7 A
Una resolución imprevisible.
D
Mi quizá, mi tal vez, mi tan siquiera,
mis dudas, mi lluviosa enredadera.
G F#m Em7 A
De todo lo posible, lo imposible.