Nos enseñaron a ver el mundo por la ventana,
quedarnos quietos, vivir sentados, perder las ganas,
desconectarnos hasta olvidar de nosotros mismos,
acobardados nada creamos, nos destruimos.
Y no respetan ya, ni siquiera, nuestra mirada,
quieren llegar a que de nosotros no quede nada.
Eso es un abuso a la intimidad,
eso es un abuso a la desnudez.
Eso es un abuso a la libertad,
eso es un abuso a la niñez.
Eso es un abuso a la divinidad,
eso es un abuso a mi corazón.
Eso es un abuso a mi propia voz,
eso es un abuso al mismo Dios.
Y ahora viajan por nuestras venas con sus mentiras,
nos envenenan con la comida y la medicina,
recetan sexo con sus recetas de moralina,
porque ellos temen que despertemos tanta energía.
Y nos inyectan ese veneno todos los días,
para vendernos que, estar dormidos, es mejor vida.
Y eso es un abuso a la ciencia, al arte,
eso es un abuso al espíritu y a mi carne.
Eso es un abuso a este presente ciego, sordo y mudo,
eso es un abuso a lo que espero, a mi futuro.
Y eso es un abuso a todos los que dieron su vida
para que hoy estemos mejor,
eso es un abuso a los que se levantan todos los días
para afrontar este horror.
Eso es un abuso a todos los que todavía creemos en el amor,
eso es un abuso a las almas.
Todas las mentiras se exponen al sol,
todas las mentiras se iluminan.
Todas las mentiras se exponen al sol,
todas las mentiras se iluminan.
Todas las mentiras se exponen al sol,
todas las mentiras se iluminan,
se revelan, se iluminan, se revelan, ay.
Todas las mentiras se exponen al sol
y se iluminan.