Ha llegado el momento que debemos despedirnos
Ya muy pronto ha de invadirnos esa amarga soledad.
Más te puedo asegurar que cuando lejos me encuentre
Ha de estar siempre latente tu cariño sin igual.
II
Es nuestro destino tan martirizante
Que siempre distante vivimos los dos.
Pero sé que pronto nos reencontraremos
Y nos besaremos con loca pasión.
I