Cantando salí del norte,
por una pena de amor,
embrujada la garganta,
soy guitarrero señor.
Enamorao de la noche,
como la luna del sol,
amante de las estrellas,
corazón de picaflor.
El vino de Cafayate,
me macha sin preguntar,
y en noches de serenata,
me ablanda y me hace llorar.
Cantando salí del norte,
soy de mi tierra el color,
y como si fuera poco,
yo soy de Salta señor.
Coplero soy como nadie,
por el querer de una flor,
soltero y sin compromiso,
cuando se da la ocasión.
En mi poncho colorado,
el carnaval se quedo,
perfumado con albahaca,
juntito a mi corazón.
Bendita tierra querida,
por todo lo que me dio,
un bombo dentro del pecho
y en la garganta un gorrión.
Cantando salí del norte,
soy de mi tierra el color,
y como si fuera poco,
yo soy de Salta señor.