He sido testigo del destello de casquillos
de soldados Con corazón de madera.
He caído cubierto en la ribera
Izando la bandera de la hoz y del martillo.
He chillado frente a cuchillos armados de ignorancia
Clavados por la gracia de un caudillo.
He sentido voces que me llevan a tu vera
Perdida como cera ante el sonido de un gatillo
He vivido noches de una luz que cegadora
Visten a deshora nuestros cuerpos de alaridos.
Trotan como bestias mis últimos latidos,
brotan como sangre mis versos entre tejidos.
Herido por el colmillo de una fiera en mi trinchera,
he visto morir la primavera.
Y si no me arrodillo ante la muerte traicionera,
es por volver a ver el brillo de tus ojos compañera.
Si nunca pensé que el mundo pudiera ser tan cruel
Es porque tú me sacabas de él
Y si estalla la guerra y he de partir
A matar o morir por un territorio
Será por los metros cuadrados del templo sagrado que mide
Que mide tu dormitorio.
Mi patria no es otra que los que alzan el vuelo
Y llegan al cielo aún con el ala rota.
Si cojo el fusil será por decir que mi única bandera
Se deshilacha rodeada de escarcha en mitad de una acera
Si cojo el fusil será por decir.
Amaneció con el sol acariciando la persiana,
bostezó con la furia de cien tigres de sabana.
Las heridas de la guerra y del amor cada mañana,
se atrincheran en recuerdos dónde nadie las reclama.
Escribí tu nombre en cada casquillo de bala,
y cada calada que daba era una daga amarga en la garganta.
Hablabas de conquistarme en cada carta,
Con tanto que decirme te fuiste sin decir nada.
Venga dilo Atrévete a mentirme cara a cara,
como el Nilo, me desbordo y arraso a la gente más cercana.
Tiempo perdido, sentimientos encontrados,
cadáveres de soldados, calaveras en la cama.
Así que aléjate, déjame vivir en tu pésame o bésame.
Sécame los mares que te derramé
Declárame la guerra o hagamos la paz a besos,
que ni yo me quiero ileso y tú jamás querrás a un preso.
Si nunca pensé que el mundo pudiera ser tan cruel
Es porque tú me sacabas de él
Y si estalla la guerra y he de partir
A matar o morir por un territorio
Será por los metros cuadrados del templo sagrado que mide
Que mide tu dormitorio.
Mi patria no es otra que los que alzan el vuelo
Y llegan al cielo aún con el ala rota.
Si cojo el fusil será por decir que mi única bandera
Se deshilacha rodeada de escarcha en mitad de una acera
Si cojo el fusil será por decir.