En una noche clara, un caminante vió
que en un jardín florido se estremecía de amor
cantando dulces penas, una rosa de carmín.
Es una pena dice, secretos de un querer
es un tormento mío, que necesito vencer
tan fuerte es mi cariño, que me parte el corazón.
Caminante tú que al pasar, un jazmín habrás de encontrar
dile al oído mi cantar, dile que me has visto llorar
caminante sólo tú, sabes de mi sufrir.