Mira como se me pone la piel cuando te recuerdo
por la garganta me sube un rio de sangre fresco,
de la herida que atraviesa de parte a parte mi cuerpo.
Tengo clavos en las manos y cuchillos en los dedos,
y en la sien una corona hecha de alfileres negros.
Mira como se me pone la piel cada vez que me acuerdo
que soy un hombre casado y sin embargo te quiero.
Entre tu casa y mi casa,hay un muro de silencio