En la noche perfumada, callada,
triste y llena de estrellas,
te traigo la dulce queja de
mis amores, de mis tristezas.
Con la suave serenata que es un lamento
que llora mi alma, escucha el cantar escucha el amor
que traigo en mi corazón, escucha el cantar escucha
el amor que traigo en mi corazón.
Oye el cantar (en la noche de luz tropical),
oye el sonar (de mi canto de plata y cristal)
oye el cantar en la noche serena y sin luz,
a por tu amor, que el amor de mi vida eres tú.
Te traigo en mi estudiantina