Cuéntame, dime, ¿Quién te ha colgado el mar de las pestañas?
Y ahora dársena de estiercol se tornó la comisura de los
besos.
Sed de limón, cimbrear como las espadañas
y en el hueco de mi espalda y la pared cuelga tu nido del revés.
Y cada huevo parido es nada y cada beso en la boca es nada.
Como si no hubiera pasado nada
Un reguero de luna será nuestra casa,
de esta luna tan puta de pechos de plata.
Será el arrullar de la libertad,
que tiene cogida pa ti y para mi en la goma de sus bragas.