Cuando llegues a Madrid chulona mía,
voy a hacerte emperatriz de Lavapiés,
y adornarte con claveles la Gran Vía,
y a bañarte con vinillo de Jerez.
En Chicote un agasajo postinero,
con la crema de la intelectualidad,
y la gracia de un piropo retrechero,
más castizo que la calle de Alcalá.
Madrid, Madrid, Madrid,
pedazo de la España en que nací,
por algo te hizo Dios,
la cuna del requiebro y del chotis.
Madrid, Madrid, Madrid,
en Méjico se piensa mucho en ti,
por el sabor que tienen tus verbenas,
por tantas cosas buenas que soñamos desde aquí,
y vas a ver lo que es canela fina,
y armar la tremolina cuando llegues a Madrid.
Madrid, Madrid, Madrid,
y armar la tremolina cuando llegues a Madrid. Que si.