Viene chispeando en la noche
la lunita viñatera
y florecen las coplitas
a orillas de las hileras.
El surco llora su pena
sangrando sobre el racimo,
baila en la noche serena
la cueca pisando el vino.
Sueña, sueña donosa
de mi Mendoza;
sobre tu pelo al viento, ¡ay!, ESTRIBILLO
juega una rosa.
Lunita de viñadores,
de mis amores.
II
Adiós, ya me voy, mi dueña,